Con el duro poema de esta semana, Cerdo ante Dios, del gran
poeta mexicano José Emilio Pacheco, cerramos nuestro puesto de poesía hasta el
próximo año. No sé muy bien las razones por las que he escogido este poema. Llegó
a mí el pasado sábado releyendo la antología de la que lo he escogido y,
sencillamente, creo que me ha servido de antídoto contra el cansancio del
ambiente prenavideño. Y, aunque el poema no tenga nada que ver con la Navidad,
lo que sí tiene es una descarnada lectura navideña. ¡Hay que ver lo que uno tiene
que aguantar cada vez que enciende la televisión o sale a la calle! En fin, yo
también me siento devorado por ese gran monstruo del consumismo y la felicidad
impostada. ¿Cómo es posible que una civilización camine en dirección contraria
a lo que en teoría fue la palabra de su líder espiritual y motivo de dicha celebración?
Seguramente el místico de Nazaret se horrorizaría del tinglado que hemos
montado en su nombre…
El poema expresa la violenta experiencia de un niño ante una
“matanza”.Pacheco evoca el recuerdo en
presente, reviviendo así, desde la pureza perceptiva del niño, la crudeza de la
escena. La inocencia y la sabiduría de un niño en la interpretación del mundo
nos deja encima de la conciencia adulta aquellos interrogantes de los que los
mayores huimos despavoridamente.
Bob Dylan publicó en 2009 Christmas
in the Heart, un disco de versiones de canciones de Navidad y
villancicos al que nunca le tuve demasiado apego. Sin embargo, esta tarde,
después de algunos años, reconozco que lo estoy disfrutando como nunca mientras
escribo este comentario. Tiene un sabor antiguo, nostálgico e íntimo que está
logrando emocionarme. Así que un consejo: si a alguien se le ocurre escuchar
villancicos en los próximos días, creo que una buena opción es que te los cante
un Nobel de Literatura. He escogido la divertida, nerviosa y gamberra versión
de Must
Be Santa. Espero que os guste. Con ella os
deseo lo mejor para el próximo año.
Las manos contribuyen a
mantener la condición universal
de los saberes. En la
experiencia táctil se articula
el dominio absoluto de ese
otro conocimiento
que engloba las incontables
trazas de la realidad.
Cada objeto existente ingresa
en la multitud de los
reconocibles con sólo ser
tocado y esa sabiduría viene
a constituir una facultad
congénita no manifestada
sino a través de minuciosos
arbitrios intuitivos. El
tacto se convierte así en un
resorte idóneo para discernir
los acopios o las pérdidas,
las desventuras o los
regocijos. Sólo los ciegos
son capaces de captar semejantes
retribuciones. Toca la mano
el mundo y quien
lo hace redescubre el mundo.
El cuerpo predilecto o
malquerido, el árbol en su
edad consecutiva, la oveja
o la garduña, la obsidiana o
la rascadera, traspasan
sus informaciones a la piel
omnisciente y allí subsisten
con la misma intensidad que
esos recuerdos cuya
preservación estriba en
regresar a sus orígenes. Toda
emoción tangible se parece a
una herida: convierte
en cicatriz su propensión a
hurgar en las texturas
mistéricas del fondo. Huelga
decir que quienes logren
la potestad de tocar lo
invisible serán un día como dioses.
José Manuel Caballero Bonald
Desaprendizajes
Ed. Seix-Barral (2015)
Desaprendizajeses el último y extraordinario
libro de poemas en prosa del jerezano José Manuel Caballero Bonald, que
ya en su título (extraído de una cita de Heráclito con la que abre el poemario) anuncia lo que en sus
páginas se manifiesta como una certeza: en la vida, para alcanzar la libertad y
aproximarse a la esencia de uno mismo y a “la armonía de lo invisible”, hay que
desandar el camino para desaprenderlo casi todo. Es un libro que no deja de
asombrarme cada vez que me acerco a él por su despliegue léxico, su absoluto
dominio del idioma y su capacidad expresiva tan admirable. Complejo en cuanto a
su construcción verbal, sintáctica y conceptual, cada poemadel libro ahonda en la realidad para
declararnos la raíz ficticia de la misma. Una brecha abierta por cada uno en la
conciencia del lector por donde se filtran la luz, en unos casos y, en otros,
la oscuridad. Metafísica y misticismo, reflexiones acerca de las propias
posibilidades del lenguaje y la poesía, y una dura crítica a la sociedad y la
cultura contemporáneas cortan el libro de arriba a abajo. Lucidez que deslumbra
y quema a los ochenta y ocho años de su autor.
El poema de esta semana, Toca la mano el
mundo, es una pequeña muestra tanto del tono como de su sus ritmos. También
es uno de los poemas, eso creo y espero, que más emociones os puede suscitar por
ser menos abstracto y más sensitivo. A mí me ha enseñado a cerrar los ojos para
ver el mundo con la piel. A sentir que las manos son la desembocadura carnal
del cuerpo y que ellas envuelven, en su tejido prodigioso, la esencia
indescifrable del mundo. A detener el tiempo en su reloj rugoso para
experimentar cómo la realidad sensible se hace origen, consciencia y
memoria. Tocamos el cielo cuando ponemos
nuestras manos sobre un cuerpo humano, dijo el poeta Novalis. Y yo creo que es una hermosa verdad, y que vivimos alejados de
ese cielo por vivir en un mundo desprovisto de caricias. Allí donde comienza el
tacto lo hacen también el amor y la humanidad. La comunicación que transmitimos
con el tacto constituye uno de los medios más poderosos de establecer
relaciones humanas. Por este motivo, abre los puños y extiende tus manos. Pon
toda tu atención en su piel. Que toque tu mano el mundo. Y que alcances a tocar
alguna vez, ¡ay! lo invisible.
Decidme como es un árbol,
contadme el canto de un río
cuando se cubre de pájaros,
habladme del mar,
habladme del olor ancho del campo
de las estrellas, del aire
recítame un horizonte
sin cerradura y sin llave
como la choza de un pobre
decidme como es el beso de una mujer
dadme el nombre del amor
no lo recuerdo
Aún las noches se perfuman de enamorados
que tiemblan de pasión bajo la luna
o solo queda esta fosa?
la luz de una cerradura
y la canción de mi rosa
22 años, ya olvido
la dimensión de las cosas
su olor, su aroma
escribo a tientas el mar,
el campo, el bosque,
digo bosque
y he perdido la geometría del árbol.
Hablo por hablar asuntos
que los años me olvidaron,
no puedo seguir
escucho los pasos del funcionario.
Marcos
Ana
Marcos Ana y Miguel Hernández se conocieron en una cárcel
madrileña a principios de los años cuarenta, recién terminada la Guerra Civil.
Miguel Hernández murió de tuberculosis dos años después entre rejas. Marcos Ana
se convertiría en el preso político que más años estuvo en las cárceles
franquistas, veintitrés en total. Ambos son símbolos de la resistencia dentro y
fuera de la cárcel y de la defensa de la libertad. Marcos Ana murió el pasado
24 de noviembre, y esta entrada es nuestro pequeño homenaje a la memoria de aquellos
que durante décadas dieron su vida para que en España algún día pudiera
celebrarse un día como el de mañana, en el que conmemoramos treinta y ocho años
del referéndum en el que el pueblo español aprobó, por amplia
mayoría, la actual Constitución.
No sabría muy bien en esta tarde de diciembre explicarme qué
significa exactamente la libertad, quizá porque nací con ella, o tal vez,
porque el propio contorno semántico de la palabra se me esfuma de las manos
cuando intento apresarlo entre estas líneas. Ponernos filosóficos sería un
insulto al propio poema de Marcos Ana, escrito en prisión después de veintidós
años encarcelado. Ser libre o sentirse libre no es solo una cuestión de corazón
y pensamiento, también lo es de realidad exterior. Me basta ahora para sentirme
libre estremecerme con la lectura y relectura de los versos en los que el poeta
expresa todo aquello de lo que no ha podido gozar durante años, que en suma son
las cosas más hermosas de la vida: la contemplación de un bosque, el canto de
un río o un pájaro, el mar o la noche estrellada, el amor... Quien ha estado
tanto tiempo privado de libertad sabe mejor que nadie qué significado tiene.
Por eso al leer este poema, la mezcla de tristeza (por el padecimiento de quien
lo escribió) y de alegría por saber que yo he gozado siempre de lo que el
propio poeta olvidó en la cárcel, me hace sentirme feliz y libre, en un tiempo
en que las democracias se han debilitado gravemente y en el que tenemos que
luchar para revitalizarlas, frente a la dictadura de los mercados, con los
valores de igualdad, solidaridad, justica, fraternidad y libertad que nuestros
mayores nos legaron y por los que lucharon y dieron su vida.
Para la Libertad de Miguel Hernández
es un fragmento de un poema más extensodel libro Elhombre acecha, escrito
entre los años 38 y 39, destruido casi en su totalidad y
censurado por el franquismo, que no vería la luz hasta 1981. Serrat lo había
versionado mucho antes. He escogido este directo de hace pocos años junto a
Joaquín Sabina porque siempre me pareció muy emocionante escuchar a miles de
personas cantar un poema que estuvo censurado durante 40 años. Para y por la
libertad tenemos que seguir sangrando, luchando, perviviendo…
Perteneces -lo sabes- a esa raza
estafada
que el dolor acaricia en los andenes.
Medio mundo de engaño conociste
y el resto fue mentira.
Has llegado hasta aquí
huyendo de mil días
que pasaron de largo.
Has llegado hasta aquí
para mostrar a todos tu inefable pirueta,
ridículo equilibrio,
ese nado a dos aguas,
piedra de escándalo,
ese triste espectáculo que ofreces,
esas gotas de miedo que salpican
tus insufribles lágrimas.
Aparta.
Ángeles Mora La canción del olvido
1985
31/10/16
Hemos visto un vídeo y hemos decidido hacer
una performance para representar esa misma obra y mostrarla a los demás compañeros,
poniéndole (…) a una mujer sobre lo que la sociedad piensa de ella solo por el
hecho de ser mujer…
Creo que es una buna actividad para luchar
contra el machismo, y además me hizo reflexionar. Cosas que yo misma pensaba
antes ya no las pienso…
Creo que el vídeo estaba muy bien porque
explicaba visualmente de una manera clara cómo una mujer luchaba para que los
demás la vieran como es en realidad. Sentí que todas las mujeres debían ser
fuertes para logar que la sociedad les quite esos prejuicios…
7/11/16
Hoy hemos seguido
trabajando en tutoría…
Hemos estado
encasillando al hombre y a la mujer prototipo a través de prejuicios. Me he dado
cuenta de que los hombres también pueden ser cariñosos y las mujeres fuertes…
Me he sentido bien
porque a mí me gustaría que hombres y mujeres tengan los mismos derechos…
Me he dado cuenta de que las mujeres también
somos machistas aunque no lo creamos. Me he sentido fuerte y con ganas de
cambiar los porcentajes de mujeres maltratadas, reducirlos a 0%...
Al principio me he sentido inferior al
plantearme cómo la gente nos considera a todas las mujeres, pero luego me he
sentido fuerte porque pienso que tenemos que luchar por nuestros derechos y por
la igualdad…
Me he sentido enfadada con la sociedad. Soy
mujer y todo eso que dicen es ridículo y me afecta. Creo que debemos hacer
cosas para erradicar la desigualdad…
14/11/2016
Experimentamos con etiquetas, adjetivos
negativos que justifican la violencia en el maltrato del hombre a la mujer. La
violencia nunca se justifica, solamente el hombre se engaña a sí mismo y,
además, hace creer a la mujer que es así…
Lo que hemos aprendido es que nunca hay
razón para agredir a alguien. La palabra que me ha tocado ha sido “maniática” y
creo que es una injusticia y es algo horrible que alguien me agreda solo porque
crea que soy así. Me gustaría que la persona a la que quieres viera otras
muchas positivas ( deportista, simpática…)
25/11/2016
Hoy hemos estado ensayando y de momento va
todo bien, me ha parecido bien la idea de Iván de generalizar una frase…
Me gusta mucho la obra que estamos ensayando
todos juntos. Creo que va a impactar cuando desaparezca la cortina…
Creo que es muy impactante. Hemos avanzado
mucho, hoy está saliendo bien. Creo que es muy original…
Los alumnos de cuarto de nuestro centro han preparado una performance para representarla delante
de todo el alumnado y profesorado del centro dentro de unos días. La han trabajado
y ensayado durante las horas de tutoría junto a Silvia, nuestra orientadora. Sobre
lo que hoy conocemos como violencia de género, ya hemos manifestado nuestra
opinión en un intento de sensibilización en nuestro entorno en este blog varios
profesores a lo largo del curso pasado. Por este motivo, esta semana no se nos
ocurría mejor comentario que la opinión de nuestros propios alumnos extraída,
previo permiso, de un diario que han ido escribiendo a lo largo de algunas
semanas acerca de la preparación de la obra mencionada. Creemos que es una
buena manera de tomarle la temperatura a la calle y al propio cambio de
mentalidad que tiene que producirse, y que en parte ya se está produciendo con
el esfuerzo de todos. Me emociona leer los fragmentos de sus diarios, su
sensibilidad y su sinceridad, su inteligencia para percibir las injusticias y
sus ganas de cambiar las cosas.
Es tan trágico lo que sigue sucediendo en este país y en el
resto del mundo en cuanto al número de víctimas, que es difícil
contabilizarlas, porque en la última semana han aumentado casi a diario. 45
hasta el día de hoy. Una vergüenza social nacional. Y no es solo
responsabilidad de los asesinos, hemos insistido mucho en este aspecto: es
responsabilidad de todos.
Ángeles Mora reivindica implícitamente en el poema de esta
semana, la chica más suave,
a través de una
crítica a la sumisión de algunas mujeres, la figura de una mujer valiente,
capaz de hacerse con las riendas de su propia vida. Sabemos que en algunas ocasiones
es muy difícil, pero cada vez más una parte de la sociedad se muestra más
concienciada, sensible y dispuesta a ayudar. Insistimos, las cosas están
cambiando, pero a veces da la sensación de que lo hacen tan despacio que
produce desesperación. Completa la entrada de esta semana otra propuesta de
nuestros alumnos: El final del cuento de hadas de EL Chojín. Un rap que cuenta
las distintas fases de una relación que termina en tragedia: un
cuento real que se cuenta en cada ciudad cada semana.
BIOGRAFÍA
Nace
en Rute en 1952,
aunque reside en Granada desde hace más de veinte años. Poeta.
Licenciada
en Filología Hispánica por la Universidad de Granada, se la considera una de
las más principales autoras de la poesía de la experiencia. Es Presidenta de la
Asociación de Mujer y Literatura Verso libre, y miembro numerario de la
Academia de Buenas Letras de Granada.
Poemarios individuales
Pensando que el
camino iba derecho (Granada, Genil, 1982).
La canción del
olvido (Granada, Diputación, 1985).
La guerra de los
treinta años (Premio Rafael Alberti 1989;
Cádiz, Caja de Ahorros, 1990).
Contradicciones,
pájaros (Premio Internacional de Poesía
Ciudad de Melilla 2000; Madrid, Visor, 2001).
Traducción al italiano: Contraddizioni, ucelli, Alessandria,
Edizioni dell'Orso, 2005.