Mi padre se pintaba las uñas de los pies. Cada una de un color. Sólo yo estaba en el secreto. Si hacía buen tiempo, se sentaba en la mecedora del balcón y apoyaba las piernas en la barandilla. Si no, me pedía que soplara para que se secaran más rápido. Luego se vestía de traje y corbata y se iba a la oficina. Nadie podía adivinar el arcoiris de sus uñas. Sol después de la lluvia: así era él.
Jesús Aguado
Carta al padre
Fundación José Manuel Lara (2016)
El pasado 17 de mayo se celebró El Día
Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia, conmemorando la
eliminación de la homosexualidad de la lista de enfermedades mentales (algo que
ahora nos parece increíble) por parte de la Organización Mundial de la Salud.
Coincidiendo con dicha celebración, el IES. Duque de Rivas, de
Rivas-Vaciamadrid, organizó las XII jornadas LGBTI+H, en las que
abordaron distintos temas como la diversidad sexual, la prevención del VIH y de
otras enfermedades de transmisión sexual, así como la sensibilización contra el
acoso escolar. A lo largo de la semana contaron con la presencia de Radio 3 y
de distintas personalidades, como el juez Fernando Grande-Marlaska, el
embajador italiano Stefano Sannino o las escritoras Rosa Montero y Nativel
Preciado. Desde hace 12 años el centro cuenta con una tutoría LGBTI+H
de atención a alumnado en riesgo de sufrir algún tipo de discriminación o
acoso por ser homosexual, bisexual o transexual. Una iniciativa pionera que no
es muy habitual en el ámbito educativo y que desde nuestro centro aplaudimos
como un ejemplo a seguir. A lo largo del curso hemos tratado este tema en
varias ocasiones para crear un clima en nuestro instituto que favorezca el
respeto de los alumnos hacia distintas orientaciones sexuales. Con esta entrada
queremos seguir fomentando dicho clima.
El poema de esta semana, Mi padre
se pintaba las uñas de los pies, del madrileño Jesús Aguado, pertenece
al libro Carta al padre, en donde el autor recorre los caminos de
las a veces difíciles, cuando no tortuosas, relaciones entre padres e
hijos. El poemario combina poemas en prosa y en verso, la acidez con la ironía
y el sarcasmo, la vida y la muerte, la autobiografía con la ficción. Este poema
pertenece a la primera parte del libro, donde la figura del padre aparece
disfrazada bajo distintas personalidades inventadas. Cuenta una ¿anécdota? a la
que, creo, podemos sacar mucho jugo. Ya el título, Mi padre se pintaba las
uñas de los pies, nos pone muchos interrogantes en la cabeza. La imagen,
desde luego, no es habitual. Mi padre se pintaba las uñas de los pies…
¿Cuál era entonces la orientación sexual del padre? La imagen que recrea a
continuación, depende de cada lector, puede ser tierna o perversa: Si hacía
buen tiempo, se sentaba en la mecedora del balcón y apoyaba las piernas en la
barandilla. Si no, me pedía que soplara para que se secaran más rápido. La
cosa es que aquel niño no guarda ningún resentimiento: Sol después de la
lluvia, así era él.
Ahora me
pregunto si una situación así podría darse en la España actual. Aunque el padre
del que nos habla Jesús Aguado es un padre inventado, en el poema funciona como
símbolo de varias generaciones de homosexuales, mujeres y hombres, que durante
la posguerra y aún muchos años después, incluso yo diría en la actualidad, no
sólo no habían “salido del armario”, sino que además, para enmascarar su
sexualidad, se casaban y formaban familias tradicionales. Uno escribe todo esto
con el siglo XXI muy avanzado, pero consciente de que, incluso habiendo
recorrido un largo camino, todavía existen inercias históricas, brotes y
rebrotes de homofobia difíciles de entender y de erradicar. Lo veo todos los
días en clase, en la calle y en los medios de comunicación. La sensación es que
estamos pagando un peaje muy caro de aquella moral franquista putrefacta (todas
las dictaduras de cualquier pelaje han sido homófobas); y, como siempre, la
educación tiene y tendrá un papel fundamental para dotar de las herramientas
necesarias a la sociedad. Es por ello que esta semana nos sumamos a
iniciativas como las del IES. Duque de Rivas. ¡Enhorabuena compañeros! Sois un
ejemplo.
La propuesta
musical de esta semana, Same Love, del rapero estadounidense Macklemore,
fue escrita en apoyo a la legalización del matrimonio entre personas del
mismo sexo, para hacer campaña a la aprobación del Referendum 74
del Estado de Washington, que dio el sí definitivo al proyecto de ley en el
2012. Creo que os gustará. En España lo conseguimos en el 2005, con la Iglesia
Católica y el sector de la sociedad más reaccionario en contra. Doce años
después, nadie con un mínimo de sentido común se atreve a cuestionarlo sin sonrojo.
Fue una medida ejemplar de la que debemos sentirnos orgullosos. La fotografía
con la que terminamos este comentario ha aparecido publicada estos días en
todos los medios de comunicación por reflejar un hecho hasta ahora insólito: la
presencia, entre las parejas de los mandatarios asistentes a la Cumbre de la
OTAN, celebrada en Francia, del marido del Primer Ministro luxemburgués. Los
tiempos siguen cambiando…
Gurb